Intento regar tus flores pero odian el sol
y sus espinas rajan los pétalos
está todo lleno del silencio de tus no latidos
de la falta de tus silbidos en el aire
de la falta de tu mente en este plano
Mis paredes son la cárcel en la que dejaste de respirar
Mis letras secas, cansadas de sangrar que no me abrazas en mi enfermedad y que yo no pude salvarte de la tuya
Tan humana
Tan insuficiente
A veces recuerdo que reíste y me aferro como si fuera la puerta a la eternidad después de la muerte
Te prometo que el mundo es peor desde que no estás
y que el dolor del pecho no se ha ido
ni un sólo segundo
¿Qué va a llenarme tu vacío?
¿Quién va a mirar nuestro jardín?
¿Cómo llevo un año y medio respirando sin ti?
Eres la razón para que yo haya nacido
y me lo recuerdo cada vez que me siento culpable de que lata el mío y no el tuyo
No te gustaría ver
No te gustaría
Me sangra tu muerte por los ojos.
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